martes, 18 de marzo de 2014

Feliz día "del amor incondicional"

El primer llanto. Y la primera sonrisa. El primer diente. O el primer paso. El primer día de colegio, y el último. El primer día de trabajo. El día de tu boda. El nacimiento de tu primer hijo, y del segundo, o el tercero. Podría ser mi padre. O el tuyo. No importa. De lo que no hay duda, es que habrá estado en estos momentos. Habrá sentido contigo la alegría. Y habrá llorado cuando tu lo hayas hecho.

Porque un padre es el que se ríe con nosotros pero llora a escondidas cuando nos ve tristes. El que nos exige y nos alaba. El que dice que no sabe cocinar pero nos sorprende con un plato exquisito el día que más lo necesitamos. El que dice que no tenemos novios, sino "amigos", pero nos ofrece su hombro para llorar cuando estos se van. El que nos dice las verdades, pero las maquilla si sabe que nos harán daño. El que comparte nuestras decisiones o, aunque no lo haga, las respeta. El que primero que se ríe de nuestros chistes, y en ocasiones el único. El que apuesta por nosotros y nuestros proyectos. El que quiere compartir momentos con nosotros. Y recuerdos. El que busca nuestros abrazos. El que se preocupa demasiado. El que hace de nuestros gustos, los suyos. El que cree en nosotros. El que nos riñe porque nos quiere y después, por la misma razón, se siente mal.

Porque no importa lo que hagamos. No importa cuantas veces nos equivoquemos o le hagamos sufrir. Siempre seguirá siendo, el que nos quiere incondicionalmente.

¡Feliz día del padre!

M.

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